Los tres espadas salieron a hombros en una gran tarde de toros en Castellón.
Castellón, 25 de junio.
Segunda de feria
Media entrada.
Toros de Daniel Ruiz, cómodos y agradables pero de buen juego, destacando segundo y cuarto.
El Juli (de cobalto y oro), silencio y dos orejas,
Manzanares (de pavo y oro), dos orejas y oreja.
Roca Rey (de blanco y oro), dos orejas y palmas trs aviso.
Saludaron Mambrú, Luis Blázquez, Daniel Duarte y Antonio Chacón.
Paco Delgado
Foto: Mateo
Es desde lugo la provincia de Castellón la más prolífica en festejos populares de las tres que componen la Comunidad Valenciana, que es, también, donde más funciones de este tipo se celebran en España; cerca de diez mil se dieron el último año de la pandemia y parece que este año aumentará la cifra. Y muchos fueron este fin de semana festivo los que se celebraron en los pueblos de alrededor de la ciudad de La Plana, lo que provocó que su plaza ofreciese un aspecto bastante desolador para el cartel anunciado. La competencia está en casa y no parece que haya fórmula que contrarreste el tirón de los bou al carrer.
Sea como fuese, los que acudieron a presenciar el segundo festejo de esta nueva feria disfrutaron de un espectáculo entretenido y a veces brillante en el que se lidió un cómodo y agradable encierro de Daniel Ruiz que contribuyó a que la tarde fuese festiva.
Manzanares veroniqueó con mucha lentitud al segundo de la tarde, con el que se rompió la cintura toreando en redondo, llevándole uncido a la tela y vaciando las embestidas todo lo atrás que le daba la longitud de su brazo y la muleta. Tras una serie al natural volvió a la derecha y si a más fue el toro a mucho más fue el torero, que cuajó una faena ligada y de no poca hondura. No buscó ahora matar recibiendo y el soberbio volapié que ejecutó le valió ya la puerta grande. Tampoco hubiera estado de más que al toro se le diese la vuelta al ruedo…
Le costó más al cuarto seguir la muleta del alicantino pero este supo dosificarle el esfuerzo para firmar otro trasteo despacioso y de gran contenido estético.
Peleó el tercero con ganas en el peto, aun en clara inferioridad de condiciones. Lo sacó pronto a los medios Roca Rey, toreando con templanza, limpieza y ligazón, pero no fue hasta el arrimón del tramo final cuando conectó con los tendidos, tirando luego sin puntilla a su oponente.
Con el manso sexto no hubo tregua y lo dio todo desde que se abrió de capa en otra labor de valor, quietud y entrega absoluta que no tuvo refrendo con el verduguillo.
Se lució El Juli al recibir de capa a su primero, que ya enseguida demostró andar justo de fuerza, pese a lo cual se le dio duro en el caballo. Llegó al último tercio rebrincado y cabeceando, derrotando al final de cada muletazo, por lo que le obligó por bajo su matador buscando corregir esos defectos pero sin resultado. Lo intentó el madrileño por ambos pitones sin lograr avivar al de Daniel Ruiz y sin que sus esfuerzos tuviesen repuesta en el público.
Salió a por todas con el cuarto, que se paró de salida, cabeceó en el caballo y apretó en banderillas. Pero al segundo muletazo ya lo tenía en el bote, exprimiéndole en un quehacer mandón y de enorme capacidad técnica, muy por encima de un toro que, este sí, acabó prestándose al lucimiento.
Cronica de Paco Delgado
Fotogarfias de Mateo de Tauroimagenplus.com







