La Asociación Gastronómica, Cultural y Taurina “De Tinto y Oro” fue marco de la presentación del libro titulado, “Mi vida inventada”, obra de Sancho Dávila, matador de toros, ganadero e ingeniero. Presentó al autor el matador de toros, Vicente Barrera, tras una introducción por parte de José Luis Ortiz, presidente de la entidad.

Sancho Dávila deleitó a una numerosa concurrencia, todos entre los que se encontraban los matadores de toros Santiago Lopez, Javier Vazquez y Rafael de la Viña,  con una sugestiva, sentida y amena exposición en la que relató parte del contenido de su libro, contó anécdotas de su carrera en los ruedos, y analizó tanto su época como la situación actual de la fiesta.

“Mi vida inventada” se trata de las memorias de un protagonista de la España del siglo pasado, en las que habla de tauromaquia y también da su particular visión de un tiempo político y social del máximo interés.

A  lo largo de sus páginas se recorre su trayectoria tanto como torero, empresario y ganadero, sin que falten referencias a su ilustre familia. El libro tiene prólogos de firmas relevantes como Fernando Salazar, Eduardo Dávila Miura, Federico Sánchez Aguilar, Santiago Arauz de Robles, Jesús Moreno, Pablo Jiménez Pasquau y Manuel Benítez El Cordobés.

Sancho Dávila (Sancho Álvaro en los carteles), comenzó a torear en 1965 y debutó en Jaen, mientras alternaba su carrera taurina con sus estudios de Ingeniero Agrónomo.

Tomó la alternativa el día 18 de marzo de 1969 en la plaza de toros de Valencia de manos de Antonio Ordóñez con Ángel Teruel de testigo, con la lidia de reses murubeñas de Fermín Bohórquez.

Aquel mismo año de 1969 confirmó su doctorado en Las Ventas. El acontecimiento estaba previsto en un principio para el día 4 de mayo, acartelado con Curro Romero y José Manuel Insausti Tinín,pero el festejo se suspendió por mal tiempo a la hora del sorteo, por lo que la confirmación se aplazó días después. Y en esta ocasión Dámaso Gómez y José Fuentes ejercieron de padrini y tetsigo de la ceremonia respectivamente.  Como ya ha quedado indicado, Sancho Álvaro compatibilizó su carrera taurina con los estudios. Y el mismo año del doctorado presentó en la Escuela Superior de Ingenieros Agrónomos de Madrid su proyecto final de carrera.

Como ganadero, en 1985 adquirió a Enrique García de la Serna su ganadería, don modificando el hierro, utilizando el mismo diseño que en su día tuvo su padre como ganadero de la Unión. Eliminó las anteriores reses, formando la ganadería con vacas y sementales de Maribel Ybarra y Torrealta. Pastan en la finca Puertolaca de Santisteban del Puerto y lucen una divisa verde botella y oro viejo.

 Sancho Álvaro, es además el duodécimo Conde de Villafuente Bermeja.

FOTOGRAFIA DE lITUGO

Cronica de E. Amat