Cuando han pasado las fechas de lo que siempre era feria taurina de Xátiva, con el paso de los años no puede dejar de venir el recuerdo de una figura emblemática en la historia de aquella plaza. Sobre todo, ahora que esta localidad valenciana, que en su momento contó con la segunda plaza en importancia de la provincia, se ha quedado un año más sin toros en su tradicional Fira d’ Agost.

Xàtiva no ha ofrecido programación taurina. En este caso, por mor del Covid que se ha llevado por delante su tradicional Fira D’ Agost.

Por esto, es el momento de volver a recordar una figura que marcó toda una época en el coso setabense. Se trata de Enrique Grau, quien consiguió dar el máximo esplendor a la plaza que en su momento inaugurase Rafael El Gallo. Aunque abrió sus puertas  el 7 de abril de 1918 con la actuación de los novilleros Cesáreo Fernández Chicorro y Enrique Escorcia Negrón, la apertura oficial de la misma tuvo lugar el 15 de agosto de 1919. Aquel día se lidiaron reses del  Duque de Veragua. En aquella ocasión completaron el terceto Juan Anlló Nacional y Manuel Varé Varelito.

Grau logró colocarla no solo como la segunda de la provincia de Valencia, sino también como toda una referencia en el panorama taurino nacional.

Durante muchos años, en la década de los 60, su propio padre Rafael Grau fue el empresario de esta plaza, y también ofreció carteles del máximo interés. Así, el 4 de abril de 1969 consiguió que casi se llenase la plaza por primera vez. Ese día anunció la actuación del mejicano Alfredo Leal, Manuel Benítez El Cordobés y Palomo Linares, en una tarde de intensa lluvia y granizo, que impidió el lleno total

Enrique Grau Juan, en el año 1989, se hizo cargo de los destinos de la plaza. “Debutó” con un festejo el 28 de mayo, en la que frente a toros de Peralta actuaron Manili, Espartaco y Joselito en lo que fue la primera corrida llamada de Primavera.

El 18 de agosto de 1993 fue capaz de poner el primer cartel de “no hay billetes” de la historia en esta plaza, a la que Joselito El Gallo calificó como “la más grande del mundo”. Y es que el día 11 de abril del año 1920 allí actuaron las dos máximas figuras del toreo momento, y que protagonizaron la llamada Edad de Oro de la Tauromaquia: Joselito y Juan Belmonte. Aquel día el coso setabense sólo se llenó en la mitad de su aforo. Ello dio pie a que en cierta ocasión le preguntaran a Belmonte sobre cuál era la plaza más grande en la que había actuado, a lo que éste respondió de modo tajante: “La de Xàtiva. Porque en ella toreé con mi compadre José y sólo hubo media entrada.

Pues Grau lo consiguió con una corrida en la que frente a reses de Alipio Pérez Tabernero hicieron el pasillo Miguel Báez Litri, Enrique Ponce y El Cordobés. Y no acaba el tema aquí, porque el 17 de agosto de 1994 logró colocar por segunda vez este siempre ansiado cartel con una corrida de Ana Romero, en la que actuaron Joselito, Enrique Ponce y Jesulín de Ubrique. Aquel día Ponce indultó un toro.

Y el 19 de agosto de 1995 se volvió a acabar el papel con el anuncio de la lidia de toros de Victorino Martín por Joselito, Enrique Ponce y Manuel Díaz El Cordobés. La foto que ilustra este artículo corresponde aquel día, con cinco Enriques en el callejón: Grau, Amat, Moratalla, Ponce y Martín Arranz.

Asimismo, el 1 de mayo de 1996 logró la vuelta de Manuel Benítez El Cordobés a Xátiva, para darle alternativa a José Pacheco El Califa ante toros de Nazario Ibáñez. Y el 15 de agosto de 1998 fue capaz de llevar a Curro Romero al coso setabense. Aquel día se lidiaron toros de José Luis Pereda y alternaron con el Faraón de Camas Enrique Ponce y El Califa.

Enrique, empresario entusiasta, emprendedor, imaginativo, trabajador incansable y con un gran don de gentes, logró con su trabajo y esfuerzo, y un equipo del que formaban parte entre otros gente como Rafael Reig, Juan José Muñoz, Rafael Lloris, Botella,  implicar a Xátiva y toda la comarca en sus festejos taurinos. La feria taurina de esta ciudad se convertía en todo un acontecimiento taurino y social, y por el coso setabense  se dejaban caer relevantes figuras de la política, la economía, la cultura, y la vida social valenciana.

Enrique fue capaz de dar festejos hasta en el mes de enero, se inventó la llamada Corrida de la Primavera, y programó en su feria de agosto de los mejores carteles en cantidad y calidad, con presencia de todas las figuras del escalafón en su plaza.

En 2002 dejó la gestión del coso con una gran feria en la que llegó a programar hasta seis espectáculos taurinos: tres corridas de toros, un festejo de rejones, una novillada picada y un espectáculo cómico taurino. Todo un record.

El 15 de agosto se celebró una novillada picada, en la que actuaron Fernando Salinas, Jorge Ibáñez y Guillermo Descals ante reses  de Apolinar Soriano. Al día siguiente se lidiaron a todos de Nazario Ibáñez para una terna compuesta por Antonio Ferrera, David Fandila El Fandi y Pepín Liria. El día 17 hubo un espectáculo cómico taurino de El Toronto y sus monos toreros. El domingo 18 de agosto los toros fueron de Viento Verde para una terna conformada por Ángel de la Rosa, Alberto Ramírez y Antonio Pérez El Renco. El lunes 19 de agosto hubo festejo de rejones con astados de Peralta hermanos para Francisco Benito, Álvaro Montes y Sergio Galán. Y el martes 20 ante toros de El Torero, hicieron el pasillo de Finito De Córdoba, Vicente Barrera y Rivera Ordoñez.

Tras Enrique, llegaron otros empresarios quienes no fueron capaces de dar ese relieve a la plaza. El último festejo que tuvo lugar en la vieja plaza se celebró el viernes, 19 de agosto de 2005. En él se lidiaron reses de José Luis Pereda por las cuadrillas de Jesulín de Ubrique, El Califa y El Fandi. Ese mismo año se llevó una completa remodelación del inmueble, utilizando el mismo emplazamiento y la estructura básica del anterior. Con una inversión cercana a los mil millones de las antiguas pesetas, su aforo pasó de las 5.000 a las 7.500 localidades de la actualidad, convirtiéndolo asimismo en un recinto multiusos. La nueva plaza se inauguró el día 16 de agosto de 2006, con una corrida del hierro de Torreherberos que lidiaron Manuel Díaz El Cordobés, El Fandi y Salvador Cortés.

El 17 de agosto de 2014 El Soro voilvió a los ruedos en esta plaza para lidiar un encierro de Benjumea junto a Daniel Luque y Román. Y el último festejo que hasta el momento ha tenido lugar en Xàtiva se celebró el 18 de agosto de 2015. En él tomó la alternativa Javier López El Javi. Se lidiaron toros de Torrehandilla y Torreherberos y completaron el terceto Juan José Padilla y Miguel Abellán. Antes, se habían doctorado en Xàtiva alcoyano Andrés Coloma Clásico, Antonio Martín Guerrita y José Pacheco El Califa.

Ahora en sus calles no cuelgan carteles taurinos. Sus gentes no pueden disfrutar de los toros en la nueva plaza. Los hoteles Mont Sant, La Murta y el Vernisa, y los restaurantes de la ciudad no albergan la visita y las tertulias de los aficionados locales y llegados de muchas localidades de la provincia. Por la Albereda  no se ve el tradicional desfile de aficionados encaminándose al coso taurino bajo un agobiante calor. Y el bueno de Agustín Perales no ha vuelto a sacar el pañuelo blanco en el palco para que comience en desfile de cuadrillas.

Y a Enrique Grau, desde su delantera de grada del cielo, seguro que se lo llevan los demonios (valga la expresión) viendo todo esto. Cuánto se te echa de menos. Tocayo. Amigo.

Foto: cinco enriques en el callejón de la plaza de toros de Xàtiva; Grau, Amat, Moratalla, Ponce y Martín Arranz. (19 de agosto de 1995)

Cronica de , AMAT

fotografia de Perales Iborra